La respuesta es sí. Los exámenes dentales de rutina califican como atención médica preventiva equina tanto como el cuidado de los pies, la nutrición, el control de parásitos y las vacunas. Al igual que en los humanos, el cuidado dental y el reconocimiento temprano de la enfermedad dental en su caballo podrían prevenir tratamientos y cirugías importantes. Es por eso que la atención médica dental es la más rentable cuando el paciente es examinado por un profesional de la salud experimentado, como un veterinario.
La odontología equina no debe confundirse con un diente "flotante". La odontología es una disciplina veterinaria relacionada con el diagnóstico y el tratamiento de la boca, los dientes y las estructuras de la cabeza asociadas. El objetivo de la odontología equina es:
• Mejorar la masticación (el proceso de masticación mediante el cual los alimentos son triturados y molidos por los dientes);
• proporcionar comodidad y alivio del dolor;
• Promover la salud general, la productividad y la longevidad.
Los caballos mayores de 5 años deben ser examinados al menos una vez al año para mantener la alineación dental correcta y diagnosticar problemas dentales lo antes posible. Los caballos mayores (17+) tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedad periodontal, y los caballos mayores de 20 años deben recibir evaluación dental y asesoramiento nutricional al menos una vez al año para mantener su condición y calidad de vida.
Si bien la pandemia de COVID-19 ha estado causando la demora de citas no esenciales, como los procedimientos dentales, asegúrese de no omitir el examen dental de su caballo este año. El hecho de que su caballo no muestre ningún síntoma obvio de enfermedad dental, no significa automáticamente que todo esté bien con la salud bucal de su animal. Los caballos simplemente se adaptan a su incomodidad y la mayoría de los caballos con problemas dentales no mostrarán signos notables, hasta que la enfermedad sea grave.
Información tomada de: American Association of Equine Practitioners
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